Un buen Jaque mediatico.

Semana delicada para algunos, complicada desde otro punto de vista. Al parecer la mayor parte de este país se siente tan triste por lo acontecido en la tragedia del viernes recién pasado como si fuesen sus propios familiares. Los medios nos bombardean minuto a minuto con informaciones (muchas desubicadas), repitiendo una y otra vez lo mismo, sólo faltándoles mostrar los restos humanos. Y parece ser que a la gente sólo alimenta ese morbo mediático. Todo esto, sin embargo, no es cuento nuevo.

Y es en este contexto donde el movimiento estudiantil llega a un puerto crítico. Se abrieron las puertas al diálogo, con una propuesta del Gobierno que para muchos es, por lo menos, insatisfactoria. Y, curiosamente, la noche anterior a que la primera reunión se concretase, sucede el trágico accidente.

Se ha dicho en reiteradas ocasiones (y pienso que está correcto) que a pesar de esa primera apertura al diálogo las movilizaciones no se deponen (aprendizaje de la "revolución pinguina"). Se estaba realizando el llamado a paro y marcha para este jueves, y, por respeto al luto, Camila Vallejo anuncia la deposición durante aquel día de lo convocado. Sin embargo, otros dirigentes estudiantiles acusaron de personalismo e incluso de manipulación del Partido Comunista en dicha decisión. Acto casi seguido, se convoca de igual forma al paro para este jueves.

Es un momento estatrégicamente complicado.

Por un lado tenemos que, de concretarse la movilización, se corre el riesgo inmediato de perder gran apoyo cuidadano. La sociedad Chilena es hipócrita, no les molesta estar todo el día viendo el morbo de la televisión en torno a la muerte de los 21, sobretodo de Camiroaga; pero si la movilización culmina con incidentes, serán catalogados de "desubicados en un momento delicado". Y me hace pensar en que probablemente se presione aún más que en otras ocasiones para que esto acabe mal.

Y a eso, además, hay que sumar el hecho de que al llevar 3 meses de movilizacion, hay un porcentaje (tal vez pequeño) que comienza a "hartarse" de las movilizaciones. Es un "apelotonamiento" de causas que pueden desembocar en una pérdida considerable de apoyo ciudadano (y súmenle el aumento que en la proxima encuesta habrá del Gobierno y de Allamand)

Por otro lado, nos encontramos en un estratégico punto donde la presión hacia la clase política no debe decaer, si lo que buscamos es conseguir cambios reales. No se puede mostrar una "siesta en los laureles" tras los acontecimientos ocurridos en el último tiempo (la muerte de Manuel Gutierrez, los desafortunados dichos del Presidente de la Cut, las descordinaciones de los dirigentes de la Confech, la reunión, etc). La sociedad, y sobre todo el Gobierno, debe saber que no se ha perdido fuerza y las desigualdades sigen en tela de juicio con la misma intensidad que durante estos 3 meses. Si se aplaza, o se topa con el 11 de septiembre (y por tanto se corre el riesgo de ser "demonizados" con "incitar al odio") o se topa con el día de la mesa de trabajo. Por lo tanto se debe realizar antes de esas fechas, pero siempre con riesgos.

O sea, si nos movilizamos, demostramos "insensibilidad" frende a una gran parte de la ciudadanía, pero si no lo hacemos, dejamos al Gobierno con la idea de que están ganando la presión mediática. Es, por lo menos, un buen jaque.

Hay que buscar alternativas. Por un lado, es totalmente necesario que Confech demuestre que pueden superar diferencias, aunque algunos deban asumir costos (como vetar a Camila Vallejo, por ejemplo, como lo hiceron con el dirigente de otra Federación). De la misma forma, es necesario tomar una postura coherente y estratégica. Tal vez no sería mala opción no movilizarse este jueves, pero realizarlo el sábado o quizás el miercoles. Como ya dije, más allá de eso seria en 11 de septiembre, y aún hay una gran parte de la población sensible a esa fecha, ya sea para tristeza u odio, incluso alegría; o bien se topa con la propuesta del Gobierno.

¿Que debemos primar? ¿La presión al gobierno o el apoyo ciudadano? Hay que darse cuenta que esto es estrategia mediática, y pensarlo de esa forma. Este es un movimiento que tiene esperanzados no sólo a estudiantes, sino que también a trabajadores y padres de familias que ven en nosotros reflejada la real opción de un cambio. No podemos tomar malas desiciones, ni mostrarnos divididos. Debemos estar como en el mejor momento siempre, sin decaer.

En fin, si se confirma totalmente la movilización del jueves hay que apoyar con todo, no podemos mostrarnos débiles. Pero, ojo, hay que estar atentos a las presiones. Buscarán incitar la violencia para dejarnos mal, esta vez más que nunca los desmanes nos pueden jugar en contra. Hay que tener cuidado, las trampas en el ajedrez nos pueden dejar en jaque mate.

Ojalá me equivoque y esto avanze bien.

Saludos!